Hola amigos,
En primer lugar muchísimas gracias a todos por vuestras muestras de cariño durante todos estos días. Sin duda estamos todos felices por este hito tan importante en la carrera hacia la curación.
Muchos os habéis preocupado ante la ausencia de posts, y es que cada día ha tenido su propia aventura. Lo que llamamos «efectos secundarios de la enfermedad» y que pueden parecer despreciables son factores sorpresa que cada día amenazan con cambiar el rumbo de los acontecimientos. Así, una mañana amanecí con el lado derecho de la cara hinchado con lo que aparentemente parecía un flemón. Acudimos a la consulta del doctor, y tras una pruebas, comprobaron que se trataba de una obstrucción en el conducto de salida de las glándulas salivales… 🙂
Los días de viento, frío y lluvia trajeron también consigo los inevitables riesgos de infecciones. Así, en la noche del domingo al lunes tuve una gran tiritera y picos de fiebre de 39.6ºC, que irremediablemente me hicieron venir al hospital e ingresarme. Y aquí llevo desde el lunes, primero de expatriado en el área de cirugía, luego de vuelta a «mi casa» en hematología en la habitación 601. Aunque hemos tardado varios días, gracias a Dios la cosa parece que está al menos controlada y progresa adecuadamente.
Así que en resumen: no hay margen para la fiesta ni para celebraciones, porque la travesía continúa sin tregua. 🙂
Estamos en Cuaresma, para los cristianos es una época de preparación, reflexión y cambio. Cada domingo vamos viendo diferentes situaciones que nos acercan hacia el misterio de la muerte y resurrección del Señor; pero que también nos hacen reflexionar sobre cuáles son nuestras actitudes ante la vida. Así, vemos cómo Jesús se enfrenta al demonio cuando éste le tienta con poder, el placer y la saciedad, la vanagloria… y sale victorioso. En otra ocasión comprobamos cómo los discípulos elegidos quedan extasiados ante la transfiguración del Señor, pretendiendo quedarse para siempre allí en lo alto del monte a disfrutar de aquel maravilloso instante.
Estos días aquí ingresado sirven inevitablemente para volver a medirme. En el mismo entorno, con las mismas personas y situaciones, ¿soy el mismo que hace unos meses? ¿Estoy siguiendo aquellos preceptos y recomendaciones que me ayudaron tanto a ir pasando cada una de las etapas de la enfermedad? Y me doy cuenta que también para mí ha llegado el tiempo de Cuaresma. Por un lado, las tentaciones… Cuando llegan las pequeñas dificultades, esa dolorosa llaga en la boca, ese pico de fiebre, esa sensación de ansia; es muy tentador para el enfermo utilizar esas situaciones para que «se pare el mundo». Es que así no puedo comer, es que mejor me quedo tumbado, es que no puedo, no me molestes… Releo mi blog y recuerdo cómo ninguna de esas circunstancias me detenía antes, cómo buscaba la superación y continuar caminando. Y al igual que Jesús, digo «apártate, Satanás».
También es muy placentero, cuando llegan las dificultades, refugiarse en la oración. Esas pausas son muy necesarias, recuperar fuerzas en los momentos de reflexión y conversación con Jesús y la Virgen. Y en algunas ocasiones, nos ocurre como a Pedro, y decimos «Maestro, qué bien se está aquí, hagamos tres tiendas y quedémonos…» . Pero esos momentos, por muy placenteros que sean, no son el fin, sino el medio que nos ayuda a seguir adelante. Hay que volver a la lucha, ponerse en la avanzadilla, retomar las riendas y avanzar. ¡¡¡VAMOOOSSS!!!
Amigos, que el Señor nos ayude a evitar las tentaciones y las comodidades, y que siempre continuemos adelante en la lucha. Y cambie nuestro corazón de piedra en un corazón de carne.
P.D: Antes de terminar, un recuerdo especial para mi Tía Carmen, que falleció esta semana, y que para mí ha sido siempre un ejemplo de generosidad vital con todos los que la rodeaban. Siempre dispuesta a que todos estuviéramos a gusto a su alrededor, y siempre dispuesta a apostar por la vida plena. ¡Te quiero, Tita! Sigues siendo un ejemplo en el que mirarme para seguir adelante.
Un abrazo a todos. Yo confío. ¡¡¡VAMOOOSSS!!!
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Curación de Gabi 
Querido Gabi. Veo que sigues subido en la montaña rusa de tu enfermedad. Unos días arriba y otros abajo. Y no me equivoco al pensar que este viaje se hace demasiado largo. Sólo decirte que TODOS seguimos estando contigo en este viaje aunque no vayamos en el mismo cochecito. Seguimos rezando por ti y seguimos deseando que llegue el día en el que sólo haya buenas noticias. ÁNIMO GABIi!!!!!
un besazo para ti y otro para Reme .
P.d. me uno en todo lo que has dicho de tu tía Carmen.otro beso.
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Gabi, he leído tu correo y enseguida he pedido que vuelvas otra vez a la normalidad. Ya sabes que después de la tempestad vuelve la calma pero sigue con tu animo, que no decaiga nunca y adelante!!! Que tu PUEDES. Un beso muy fuerte con Reme y tus padres
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Querido gabi, te pones un liston tan alto….es normal que caigas en la tentacion de quejarte por todas las cosillas que siguen saliendo….se está haciendo larguillo.. Y nosotros..cuantas veces nos quejamos al dia por pequeñeces sin importancia. Lo que me maravilla de ti es tu capacidad de superación, tu fé inquebrantable. Qué ejemplo nos das cada dia. Una vez mas te doy las gracias por seguir escribiéndonos. Seguimos a vuestro lado. Y seguimos Confiando.
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Mucho ánimo Gabi. Sin duda, tu enorme lucha y superación conlleva esos picos de estado anímico en esta travesía compleja. Y ahora màs que nunca TODOS CONFIAMOS. VAMOOOSSS. Un beso muy fuerte de Pedro y mío para ti y Reme.
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Gabi,muchas gracias por tu recuerdo hacia mi madre,no dudes que ella esta pendiente de ti desde el cielo pues en vida rezaba por ti y ahora tendra mas linea directa para sus oraciones.
Animo Gabi…..,la lucha continua pero el final feliz cada dia esta mas cerca
Muchos besos querido primo😘😘
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Estamos contigo, mandándote nuestro apoyo y cariño, nuestras oraciones. Un besazo para todos y para Reme. Animo!!! Tú puedes!!!! Yo confío!!! VAMOSSSSSSSSS!!!
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El besazo era para TI y para Reme, que el móvil en ocasiones pone lo que quiere 😊
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Con la oracion de todos y tus fuerzas todo saldra bien.
Animo Gabi.
!!!!! Confiamos, Vamosssss!!!!!!
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querido Gabi, creo que tienes derecho a esas pequeñas tentaciones, amigo, eres humano!!!! 😉Hay que seguir luchando en esta difícil travesía, eres fuerte y además tienes a tu lado a los mejores, al Señor y a su Madre, nuestra Madre, a tu maravillosa Reme, a toda tu familia y a tus amigos, no estás solo. Sigue así, lo estás haciendo genial.
Cuídate mucho, mucho ánimo, rezamos por tí y los tuyos. Yo CONFÍO. VAMOSSS!!!! Un beso enorme. ❤️
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Venga Gabi, eso es un poquito de fiebre de na!!! Tienes un poquito de mas «excusa» que los demás para esa fiebre pero vamos que ahora estamos rodeados de gripes, así que es fácil no escaparse de ninguna 😉 Venga Gabi, pasito a pasito, tenemos ganas de verte! Un chocolate calentito con churros y unos dulces buenos de Semana Santa de tu querida Velez te quita todas las penas!!!!
Un besazo para toda la familia!!!!! Deja ya el pase VIP del hospital, hombre ya!!!!
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Lo tuyo es una transfiguración con Reme, tus palabras nos hacen sentir admiración y gusto, nos convierten y mejoran nuestros sentimientos, nos hacen mas misericordiosos, GRACIAS por compartir esta cuaresma con nosotros, pronto llegará la RESURRECCIÓN y podremos felicitarnos.
VAMOSSSSS estamos contigo, con Reme, con tu madre …. con todos vosotros, os queremos y seguimos rezando hasta que lleguemos al FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN !!!
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Gabi mucho ánimo!! Es normal que caigas en esas tentaciones… En el día a día nos quejamos de cosas más insignificantes!
Te admiro porque eres capaz de levantarte ante cualquier adversidad..es un camino difícil.. Pero tu puedes. VAMOOS!!
Un gran abrazo y muchos ánimos! 😘
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Te agradecemos ante todo tus palabras,que tanto nos ayudan a reflexionar, sobre todo como tu dices en estos días de Cuaresma. Sentimos la muerte de tu tía y os acompañamos en el sentimiento a toda la familia. Y a ti ¿que te vamos a decir?que te queremos y que te deseamos, como siempre lo mejor.¡¡Animo,tu puedes!!
Un fuerte abrazo para ti y para Reme y los niños,que tampoco los olvidamos,
VAMOOOS!!!
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Querido primo,
Las tentaciones nos ponen a prueba cada día. Las hay de todo tipo: alimentación, esfuerzo, trabajo…. Quién no ha sucumbido a la tentación de zamparse un buen pastel de chocolate cuando no debía, o a la tentación de quedarse en la camita durmiendo cuando había que ir a la facultad, o incluso a la tentación de no estudiar para un examen…, pero lo verdaderamente importante es tener la capacidad para saber que dejarnos llevar no es la solución. Hay que luchar y para eso tú, querido Gabi, eres el number one! Un luchador y un valiente.
Vamos Primo!!! Yo Confío!!!
Y un beso para Tita Carmen. ¡Guapa!
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Gabi tu Fe es tan enorme que la irradias de forma impresionante. La Cuaresma es tiempo de sacrificios y tú vuelve a tenerlo pero sabes que saldrá de nuevo de este contratiempo. Sigue como eres Javi, el Señor te lo premiará pues estás haciendo muchísimo bien a muchísima gente.
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Querido Gabi, me haces sentir tan pequeña a tu lado… ( y no me refiero a estatura…) . No sería normal que no tuvieras ningún momento de bajón o de tentación como tú dices. El camino que estás recorriendo está siendo duro, durísimo, y tú lo estas afrontando con una fortaleza y una fe tan enormes que nos das un testimonio increíble. De nuevo mil gracias por compartirlo con nosotros porque nos haces poner los pies en el suelo y valorar lo verdaderamente importante.
Sé que estas mejor, gracias a Dios. No sabes la alegría que nos da cuando sabemos de tu mejoría. Estamos contigo, con vosotros. Seguimos rezando mucho. ¡¡TODO VA A IR BIEN!!! ¡¡VAMOOOS!!
Cuídate mucho. Un beso enorme ❤️
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Querido Gabi, la fiebre tan alta la coges precisamente por ser tan alto. Ahí arriba debe hacer más frío que al nivel normal de la gente (véase en torno al 1,70 m). Así que ya sabes, cuando salgas, agáchate un poquito. Líate bien la bufanda y abrígate como solo las madres saben abrigar a sus hijos pequeños. O sea, como si no hubiera un mañana. Ya sabes lo que decía Gila al definir el abrigo: «Eso que se ponen los niños cuando las madres tienen frío». Y es verdad, ves jugando a un niño, corriendo, subiendo, bajando, saltando, …y cuando para un poco para descansar, todo congestionado, llega la madre y le dice: «Anda hijo abrígate y ponte el jersey», mientras al niño le caen los sudores por la frente. También hay otro remedio universal en todas las madres: «Niño cierra la boquita». Con esto se consigue un doble objetivo: que no le entre frío al niño en la garganta y que la madre disfrute de unos minutos de silencio.
En fin, Gabi, que te cuides, abrígate y procura no salir los días de frío (aunque seguro que todo eso ya te lo ha dicho tu madre)
Un caluroso abrazo de toda mi familia
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Gabi: Al leer tu correo nos sentimos junto a ti y junto a Reme, acompañandote y dandote animos del mucho que tu nos trasmites. Un fuerte abrazo de vuestros tios.
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Me llego tu blog a través de una compañera de trabajo, ya que conozco a Reme tu mujer y un día preguntando por ella me enteré de la situación. He leido algunas entradas y he podido comprobar no solo la enorme fé que tienes y el valor de mostrar sin tapujos el momento por el que estan pasando a tod aquel que entre en estas páginas, que sirven supongo no solo como terapia personal y descarga emocional, sino incluso como ayuda a otras personas que estén viviendo lo mismo cada día, sino también al mismo tiempo como ejemplo de lucha, de superación y de un enorme amor incondicional a tu familia. Pienso a menudo en los hijos tan pequeños que tienen y en como Reme deberá dividirse cada día para afrontar situaciones extremas y sin horario establecido, entre casa, colegio y hospitales y desde aqui quiero mandarles un abrazo y esperar que pronto vuelva a verla por aqui porque eso supondrá una total curación. Por otro lado, felicitarlos a ambos por esa familia tan linda, tan centrada en lo que realmente es la verdad de la vida: el amor, el cariño y la simpleza de compartir las alegrias y las penas con quienes nos quieren y aprecian. Ustedes están dotados de ese cariño y de esa fe y con esas dos llaves y la perseverancia….Todo se consigue!!!!!. Mucha suerte. Espero verlos un día saboreando entre risas una puesta de sol al borde de la bahía
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