Leucemia

Moratones

Hola amigos,

[Nota: Antes de seguir leyendo, te agradecería que le dieras al botón “Cerrar y Aceptar” en el mensaje que puede que aparezca abajo de tu pantalla. La nueva legislación europea de protección de datos requiere este proceso. Gracias]

En primer lugar, os pido disculpas por haber faltado a mi cita con vosotros este fin de semana pasado. Los cumpleaños de Gabito y Elena, que hemos celebrado en familia y con sus amigos, han absorbido la mayoría del tiempo y de la energía.

Llevo ya más de una semana de tratamiento con las pastillas de quimioterapia para intentar reducir el tamaño e intensidad del tumor, y de deferasirox que pretende reducir las (altísimas) concentraciones de hierro en mi cuerpo, acumuladas tras todos los medicamentos y la enfermedad injerto-contra-huésped que aún permanece latente. De momento no percibo grandes efectos secundarios: algo de ansia sobre todo por las mañanas, diarrea que va a más en estos días, y periodos repentinos de mareos/baja energía que pasan con un poco de paciencia y reposo. 

También he comenzado a tomar un preparado natural basado principalmente en aloe vera y miel pura de abejas que elimina toxicidad del cuerpo y refuerza el sistema inmunitario, ayudando todo el proceso de sanación celular en el que me encuentro en este momento. Se trata de una receta publicitada hace algunos años por un monje franciscano, y que aprovecha las bondades proporcionadas por nuestra querida madre naturaleza. No se trata de un sustituto de nada, sino un complemento de todo.

En la primera revisión de este jueves 29 hemos comprobado que los fármacos están afectando al hígado, pues tengo la bilirrubina y las encimas hepáticas bastante elevadas. Sin embargo, parece que los riñones o el recuento de hematíes, leucocitos y plaquetas se mantiene en niveles adecuados.

Releo lo escrito hasta aquí, y me doy cuenta que he gastado ya mis primeras 250 palabras en un detallado (y algo insípido) parte médico. Lo que dicen los parámetros y los análisis es una parte muy importante sin duda de este proceso. Pero hay otra, no menos importante: lo que grita tu cuerpo.

Tras seis días de quimioterapia, al ir a ducharme, observé asombrado que había algo diferente en mi costado izquierdo. Me fijé con detenimiento: un moratón había aparecido justo en la zona de donde provenían mis dolores. La misma zona que el PET/TAC ha identificado como la que permanecen las células cancerígenas.

El moratón en el costado izquierdo, noviembre de 2018

Me pareció algo auténticamente inaudito. ¿Un moratón? ¿Justamente y únicamente en la zona donde se supone tengo masas tumorales? No quise sugestionarme con aquella señal. Sin embargo, con el paso de los días, el dolor del costado fue a menos. Ya no necesito analgésicos para soportarlo. Y esto considero que es un síntoma de que ahí, justo ahí, está pasando algo. Que los tejidos se van removiendo. Que la curación avanzaba lentamente, pero viento en popa.

Y, como un flashback, recordé justo en ese momento una imagen de Marzo de 2017. Por aquella época, habíamos recién detectado la recaída extramedular masiva. La mayoría de músculos de mi cuerpo estaban invadidos. Poco parecía poder hacerse. Pero mi doctora y yo apostamos por un primer paso, había que intentarlo: una quimioterapia en vena que barriese lo máximo posible. Recuerdo perfectamente que cuando hablamos mi doctora y yo, le pregunté: «¿Y cómo vamos a saber que la quimio está funcionando?». Y ella me respondió: No lo sabemos con certeza Gabi, pero debemos ver alguna reacción en los músculos. Algo tiene que pasar. Y bien que aquella reacción ocurrió: los músculos de mi cuerpo, en especial la zona de la rodilla izquierda que era la que tenía más concentración de células cancerígenas, comenzaron a amoratarse, en una imagen dantesca, parecida a los desastres nucleares.

Los moratones por todo el cuerpo, marzo de 2017

Amigos, comienza el Adviento. Un tiempo de alegría y de espera esperanzada. El niño Dios está en camino, un niño que es Rey de la Vida. La Virgen es mi ejemplo a seguir, con su callada presencia, con su paciencia y amor infinitos. Adviento, donde justamente en la iglesia todo se adorna de morado para acompañar esta espera… ¿casualidad?

Benditos moratones. Signos inequívocos de esperanza. Imágenes duras, pero imágenes de un proceso de curación que ha arrancado con fuerza. Mi hígado pagará un cierto peaje (espero que temporal), pero no vamos a parar hasta eliminar el máximo número de células posibles. A convertirlas en moratones que tiñan el camino de este último mes del año.

Os deseo un muy feliz adviento. Dios os bendiga a vosotros y a todas vuestras familias. Un abrazo. Yo confío. ¡¡¡Vamoooosss!!!

13 respuestas »

  1. Hola Gabi!!! Te hemos echado de menos no sin cierta preocupación…sin duda estás y estamos en manos De Dios siempre!!! Tú Fe te curará Gabi, estamos seguro de ello. Un abrazo. Sigue confiando 🥰 Belén y Antonio

    Le gusta a 1 persona

  2. Además de hacerme sonreír imaginándome a la doctora y a ti iniciando la quimio en venas y sin saber cómo responderá el cuerpo, sois fantásticos😜! Conejillo puro de india, vamos. Y además con humor del bueno. Naturalmente que ese moretón, primo hermano del de la rodilla, es buena señal de que la cosa va viento en popa, o sea: pa’lante. Son muchas las oraciones que se elevan para tu curación y es posible que en el cielo se lo estén pensando como el juez y la viuda, que ya está bien de darles la lata…
    Gabi, agoté no sé cuando las palabras que guardaba para darte ánimo, pero veo que no las necesitas ; te bastas tú solito, lo cual es fenomenal. Esperemos que todos esos nuevos síntomas sean presagio de un feliz adviento tuyo personal. Así se lo pido yo y lo deseo de todo corazón.
    Te puedo conseguir miel pura de abeja, de la buena, de Yunquera. Es más, tengo un bote, menos unas cuantas cucharaditas, que te puedo dar ya. Está de rechupete. Un abrazo muy fuerte y a no decaer. Un beso grande a Reme.🤗😘

    Enviado desde mi iPhone

    Le gusta a 1 persona

  3. Gabi
    Como tu bien dices, en la Iglesia el morado significa siempre que algo mejor va a pasar. Confío y pido que sea así en tu caso , que el morado deje paso al blanco inmaculado de tu pies y al blanco puro de tu interior.
    !Confiemos que todo venga con el nacimiento del Niño Jesús¡ !Animo y adelante¡ Esperamos tu carta con buenas noticias.

    Le gusta a 1 persona

  4. Vamos Gabi, seguimos confiando,!!!
    Siguen los cumpleaños de tus hijos y ya mismo el tuyo!!
    Adviento, Esperanza VIDA !!!
    Un gran abrazo para Reme y para ti

    Me gusta

  5. Te quiero Gabi. Eres un ejemplo a seguir, no te puedo mentir… Me he preocupado mucho al empezar a leer el post. Pero jo, de nuevo, tu firma de ver la vida me vuelve a enseñar. Gracias gracias y mil gracias, contigo aprendemos todos. Deseo que remita todo esto y te pongas en forma pronto. Feliz Adviento esperanzado. De nuevo, te quiero muchísimo
    Besitos

    María

    Le gusta a 1 persona

  6. La fe es la bendición mas elevada que tenemos y tú eres uno de ellos, uno de los elegidos que han descubierto la grandeza de su verdadera fe. Vamos Gabi, podemos siempre fuertes.

    Me gusta

  7. Señales de vida ,Gabi. Señales que nos indican que continuamos remando en esta travesía, para llegar a puerto.
    Adelante,remamos contigo,juntos.
    Aquí estamos Gabi.Aquí seguiremos.Aquí te queremos.
    Vamossssss 😘😘😘

    Le gusta a 1 persona

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.